¿Cómo salir de las deudas?

Tener deudas es una situación de estrés para cualquier persona. Es por eso que, si estás frente a esta situación una vez detectada, es importante empezar a trabajar en analizar tus números para entender por qué te endeudaste y luego para armar un plan que te sirva para revertir la situación.

Si tengo deudas ¿Por dónde se empieza?

Lo primero es armar un presupuesto financiero personal para conocer tus gastos mensuales e ingresos. De esa forma vas a poder conocer cómo y en qué gastas tu dinero.

En el caso que tengas deudas es probable que hagas un manejo ineficiente de tus ingresos y para poder cambiar esa situación es necesario conocer e identificar qué cambios podrías hacer en tu organización para salir de esta situación.

Si todavía no armaste un presupuesto te recomendamos leer la siguiente nota.

Luego de armar tu presupuesto vas a poder identificar qué ajustes debes realizar en tu economía personal para poder afrontar todos los gastos con tus ingresos actuales. Ese es el primer objetivo que deberías intentar alcanzar. Muchas veces simplemente reduciendo algunos gastos variables podrás lograr que el dinero te alcance. Sin embargo, en algunos casos esto no es suficiente y la solución puede ser generar ingresos extras para poder afrontar el pago de todos tus gastos mensuales.

El siguiente paso consiste en realizar una lista de todas las deudas que tenés hoy en día para poder identificar cuánto dinero necesitas para saldar las mismas.

EconoMía Tip: Es recomendable ordenar las deudas de menor a mayor de acuerdo al monto total de la deuda o bien de mayor a menor considerando la tasa de interés más alta como la primera.

¿Cómo armar un plan para salir de las deudas?

Una vez que identificaste cuáles son todas tus deudas es momento de analizar cuál será el método indicado para poder saldar las mismas. Existen varios métodos para ello, a continuación te mencionamos los más conocidos:

• Método 1: Bola de nieve - De la deuda más pequeña a la más grande

Se trata de uno de los métodos más famosos para eliminar tus deudas. Consiste en organizarlas dependiendo del saldo total que debas en cada una: de la más pequeña a la más grande y comenzar a pagar siguiente ese orden. Para hacerlo, es necesario que tengas suficiente espacio en tu presupuesto mensual para pagar sin problemas las cuotas de todas tus obligaciones y un espacio extra para pagar un valor adicional al crédito más pequeño.

• Método 2: Tasa de Interés - De la más grande a la más pequeña

Consiste en analizar la tasa de interés de cada una y ordenarlas de mayor a menor. Ya podés comenzar a juntar el dinero para pagar la que mayor tasa de interés tenga, para luego seguir por las demás. Este método si bien financieramente es correcto, muchas veces puede ser muy difícil de realizar, porque es posible que te lleve mucho tiempo finalizar con esa primera deuda.

• Método 3: Refinanciación de deudas

Si no tienes suficiente efectivo todos los meses para empezar una bola de nieve y las cuotas de tus créditos están haciendo que el dinero apenas alcance para cubrir tus obligaciones, hacer una refinanciación puede ser una buena alternativa. Para este método es necesario que negocies directamente con las entidades o personas a las que les debes dinero.

• Método 4: Consolidación de deudas para tranquilidad mental y financiera

Se trata de agrupar en una sola deuda la mayor cantidad de préstamos que puedas tener con otras entidades prestadoras de servicios financieros.  Es decir, sacar un préstamo que cubra todas tus deudas y solo pagar la cuota de ese préstamo.

De todos los métodos, según diferentes estudios, el método de la bola de nieve es el más conocido y el que mayores resultados ha generado en las personas. De todas formas, para tomar la decisión correcta deberás analizar en profundidad cada una de estas opciones y elegir la que mejor se adapte a tu situación.

Esto es un proceso largo que requiere de tiempo y esfuerzo, pero vale la pena. Una vez que lo logres vas a poder comenzar a ahorrar para hacer realidad tus proyectos y además tendrás la tranquilidad de que tus finanzas se encuentran ordenadas.